Apenas inició la campaña el día de ayer. Se enunció antes de entregar los fragmentos de esta columna, que los candidatos de Fuerza por México y el abanderado de la coalición, Carlos Herrera, comienzan sus ejercicios en la capital del Estado.
Antes de entrar en detalles, los datos revelaron un ascenso en el porcentaje de aceptación para Cristóbal Arias Solís, quien emparejó a Carlos Herrera. Tuvo un aumento acelerado y, en la antesala del inicio, es un logro fundamental. En cambio, la áspera conducción de Morena y los claroscuros de su proceso con su candidato, pondrán en entredicho la decisión de los votantes que, antes del comienzo, ha tenido un duro panorama en cuanto al registro de la candidatura luego de que pasó por un nuevo maremoto que sacudió su estructura una vez que Instituto Electoral de Michoacán ratificó quitar la candidatura a su abanderado.
Seguramente Morena no contó con eso; pensó que la circunstancia sería fácil con el solo hecho de ser atractiva la plataforma con la presencia de AMLO. Sin embargo, el presidente no estará en la boleta; también, tienen que resolver la situación de la sala superior que ratificará o anulará en la determinación del INE de suspender la candidatura de su abanderado o, en definitiva, echar andar el plan B que tanto han negado. En esa coyuntura, se mantiene abierta la posibilidad de German Martínez.
Se sabía que eso sería un golpe duro. Ahora, las cosas al inicio de la campaña cambian por completo. Si nos basamos en la premisa de la distancia, el que más se acercó fue Cristóbal Arias Solís; además, la decisión del IEEM vino a fortalecer su intención de voto. Eso habló del desorden de la dirigencia Nacional del partido guinda y de sus malas decisiones. Pero más allá de eso, consideró que el perfil que mejor llega en todos los sentidos es CAS.
Luego de registrase desde Fuerza por México algunos analistas opinaron que, la elección de Michoacán, sería un ejercicio de tercios. Tuvieron razón: la contienda se dividió. El pleno desarrollo de la fase previa, el senador con licencia regresó a un nuevo proceso electoral; no lo hizo con Morena, pero logró acumular una plataforma que no le pide nada a nadie. Entonces, sin problema, puede convertirse en la respuesta de los michoacanos.
Son muchos los antecedentes históricos como para asegurar que, el 6 de junio, nadie tiene asegurada la victoria. Sin embargo, si analizamos el proceso como cerró, y los detalles que saldrán— es muy posible que los números de intención de voto se muevan rápidamente; pasó en Nuevo León y Campeche.
Eso lo puede hacer posible Cristóbal Arias Solís si sabe canalizar y tejer una óptima estrategia. Además, dejó una buena relación con el presidente Obrador, así como con referentes de la talla de Ricardo Monreal. El apoyo lograría venir desde adentro también luego de las injusticias del CEN de Morena; no se debe olvidar eso.
Una oleada de Morenistas lograría votar por CAS, asimismo una fuga de simpatizantes puede venir a parar a la causa del nativo de Churumuco.
Cristóbal Arias puede surgir como respuesta luego de las fracturas en Morena y la desinflada oposición.
Si alguien es capaz de aglutinar a todos los sectores sociales es Cristóbal Arias Solís. La magnitud de su legado sigue siendo muy fuerte; eso lo debemos tener presente— porque CAS ganó más de 42 encuestas nacionales cuando figuró como aspirante favorito en Morena. No tuvo rechazo. Aunque su nuevo ciclo democrático sea desde Fuerza por México, eso es lo que menos importa si tomamos en cuenta cada uno de los perfiles; no hay punto de comparación entre uno y otro: CAS es políticamente el más maduro, competente, sagaz y experimentado.
Antes de que pasara la determinación del IEEM, Cristóbal Arias cerró entre 23 y 28% de intención de voto, pero, con lo que pasó, subirá aún más. Terminará siendo el primer lugar de acuerdo con todos los detalles que han pasado.
Y es que el tope que alcanzó Carlos Herrera es de 20%. De ahí no avanza. En cambio, Cristóbal Arias Solís en solo dos meses creció más de 16 puntos. Basta con reconocer eso. Por ello, pasó a ser el favorito para conquistar Michoacán, no tengo duda. La elección estará centrada en él.
Durante estos dos primeros meses marcó la agenda en los temas de interés público; todo giró en torno a su semblanza; optó por seguir recorriendo el Estado y, eso, le sirvió para ratificar que es un aspirante políticamente muy competitivo.
